Si necesitas reparar un radiador de calefacción, a menudo es necesario vaciar y llenar después el radiador. El proceso de vaciado es sencillo si se conocen los pasos a seguir. En este post te contamos cómo vaciar y llenar un radiador de agua.
Partes del radiador
Un radiador se compone de las siguientes partes:
- Elementos del radiador. Comúnmente conocidas como costillas, son el cuerpo de radiador. Este se puede componer de varios elementos que se van uniendo entre sí con piezas roscadas que permiten la libre circulación de agua por su interior.
- Tapones de radiador. Son los encargados de dotar a los elementos de roscas aptas para la conexión de las llaves, purgadores o simplemente sirven de tapón para evitar que el agua pueda salir del propio radiador.
- Llave del radiador. Hay varios tipos en el mercado, pueden ser monotubo o bitubo y la llave cambia en función del tipo de instalación. La llave es la encargada de abrir y cerrar el paso hacia el interior del radiador.
- Purgadores. Sirven para sacar el aire acumulado en el interior del radiador.
Para más información, puedes leer nuestro post sobre Cómo funciona un radiador de agua >
Una vez identificadas las principales partes del radiador, veremos cómo puedes vaciarlo.
Cómo vaciar un radiador de agua
El procedimiento para vaciar un radiador de calefacción es sencillo. Para llevar a cabo el procedimiento sin contratiempos es importante que tengas en cuenta algunos detalles:
- Cierra la llave del radiador. De este modo, aislarás el radiador del resto de la instalación y cuando empieces a vaciarlo solo saldrá el agua que quede retenida dentro de este.
- Afloja la tuerca de unión entre la llave y el radiador. Todas las llaves llevan una tuerca que las une al radiador, si la alojas con una llave separarás los elementos de la llave saliendo el agua del interior.
Una vez aflojada la tuerca, empezará a salir el agua del interior del radiador. Puedes poner un recipiente debajo para evitar mojar la superficie. De todos modos, es posible que caiga algo de agua al suelo, por lo que te recomendamos que tengas una fregona a mano para recogerla.
Cuando deje de salir agua, el radiador ya estará vacío y podrás realizar la reparación que tenías en mente.
Cómo llenar un radiador de agua
Para volver a llenar el radiador solo tienes que realizar los siguientes pasos:
- Vuelve a unir el radiador a la llave mediante la tuerca que has aflojado anteriormente.
- Abre la llave del radiador para que empiece a entrar agua en él.
- Abre el purgador para que vaya saliendo el aire que habrá entrado en el interior del radiador.
- Revisa la presión del circuito de calefacción. Esta información puedes verla en la caldera y es normal que al llenar el radiador la presión baje. Añade presión con la llave de llenado que incorpora la caldera hasta llegar a los 1,5 bar de presión. Una vez regulada la presión vuelve a abrir el purgador de aire del radiador que acabas de vaciar para que este acabe de salir.
Importante. Una vez finalizado todo el proceso, es fundamental que te asegures de que el purgador está totalmente cerrado y que la presión del circuito de calefacción es de 1,5 BAR.
Por último, para comprobar que has finalizado con éxito, pon en marcha la calefacción y comprueba que el radiador se calienta completamente.
Si el radiador no calienta correctamente puedes ver nuestra guía Cómo regular los radiadores de la calefacción >
