Cómo analizar el agua de la piscina

Para poder disfrutar del agua de la piscina en perfectas condiciones es imprescindible tratarla correctamente. Además de tratarla, es importante saber analizarla bien, ya que un análisis adecuado de los parámetros clave permitirá ajustar el tratamiento a las necesidades reales que tiene el agua de tu piscina.

El agua de la piscina es muy susceptible a los cambios: los días de lluvia, por ejemplo, entra agua en la piscina con gran concentración de partículas en suspensión en el aire. En cambio, en los días de fuerte calor el agua se evapora con mayor rapidez. Ambas circunstancias hacen que inevitablemente cambie la proporción de agua tratada y de agua nueva de reposición. Por eso, al rellenar la piscina debes analizar siempre el agua. 

• Métodos de análisis del agua de piscina
• Parámetros de análisis del agua de piscina

1. Métodos de análisis del agua de piscina

Existen varios métodos para analizar el agua de la piscina, encuentra el sistema de análisis que mejor se adapta a tu piscina.

Analizador con reactivo

Tiras analíticas

Analizador digital

• Analizador con reactivo: Es el más utilizado debido a su sencillez y bajo precio. Basta con tomar una muestra del agua con una probeta y añadir la solución reactiva indicada para el parámetro que se quiera analizar. El agua se volverá de un color que hay que comparar con la tabla que incorpora el analizador. No es un método muy preciso pero para el análisis de una piscina doméstica es más que suficiente.
• Tiras analíticas: El principio es el mismo que el anterior pero la manera de llevarlo a cabo es diferente. En este caso, se sumerge la tira directamente en el agua y esta cambia de color al estar impregnada de la solución reactiva. El color de la tira hay que compararlo con la tabla proporcionada por el fabricante.
• Analizador digital: Es más fácil de usar y también más preciso. Se sumerge el aparato directamente en el agua y este hace la lectura precisa del parámetro seleccionado. Existen analizadores que ofrecen la medición de uno o varios parámetros, dependerá de cada modelo.

2. Parámetros de análisis del agua de piscina

A continuación te ofrecemos los parámetros importante que debes tener en cuenta cuando quieras analizar el agua de cualquier piscina:

pH

Es vital controlarlo. El pH es el indicador que mide la acidez o basicidad del agua, una característica química de la que dependerá cómo reaccionan todos los productos químicos que se usen para el tratamiento del agua de la piscina. Se considera que el agua es neutra cuando el nivel de pH es entre 7,2 y 7,6. Si está fuera de estos valores habrá que regularlo con productos químicos específicos. Es recomendable hacer el análisis a diario y regularlo en caso necesario para evitar problemas con el agua de la piscina.

Cloro

Hay diferentes tipos de cloro que se pueden encontrar en el agua de la piscina:

1. Cloro libre: Es el responsable de la eliminación de los microorganismos presentes en el agua. Se agota cuando ha cumplido su función y desaparece.
2. Cloro residual libre: Es la fracción de cloro libre que queda después de haber eliminado los microorganismos presentes en el agua. Su función es eliminar los microorganismos que puedan llegar al cabo de unos pocos días.
3. Cloro residual: Es la fracción de cloro que queda presente en el agua y que no aporta nada a la desinfección. Esta fracción residual es la causante de la irritación de ojos y mucosas, así como del olor característico que desprende el agua.

Dureza

La dureza mide la cantidad de cal presente en el agua. Al igual que en la vivienda, la cal en la piscina puede causar inconvenientes. La cal se deposita y se incrusta en las paredes dejando marcas blancas. Al adherirse a las tuberías y a los diferentes elementos que componen el conjunto de la piscina, puede deteriorarlos e impedir su buen funcionamiento.

Mineralización

La presencia o no de minerales en el agua puede ocasionar más de un problema. Un agua con poca mineralización provocará corrosión en los elementos metálicos del vaso de la piscina, ya que el agua tiende a reaccionar con el medio para  nutrirse de minerales. Por el contrario, en caso de tener un elevado nivel de minerales en suspensión se notará por el sabor y el fuerte olor. Además, aumentará la conductividad eléctrica del agua.