Una columna de ducha puede dar un aire más moderno al baño sin gastar mucho dinero. Hay una gran variedad de modelos con mucha diversidad de precios y diseños. Lo bueno de las columnas de ducha es que son fáciles de instalar y permiten sustituir el grifo de ducha o bañera con total comodidad.
A continuación vamos a ver los aspectos más relevantes para seleccionar la que mejor se ajuste a tu presupuesto y necesidades.
Instalación
En plato de ducha o en bañera
Lo primero que se debe tener en cuenta es si se quiere instalar la columna en un plato de ducha o en una bañera. La principal diferencia entre ambas es que la de bañera tiene un caño por donde saldrá el agua para llenarla.
Reformas o recambio
Otro detalle que influirá en la decisión del modelo es si se está reformando completamente el baño o si solo se quiere sustituir el actual grifo por una columna. Existen columnas de ducha con la instalación empotrada a la pared que son muy estéticas pero solo recomendables en caso de reforma total del baño, ya que la adaptación puede ser costosa y complicada. En caso de que no se reforme el baño, la columna de ducha deberá ser con la instalación vista en la pared porque se adaptará perfectamente a la instalación existente.
También hay que tener en cuenta criterios estéticos y de confort para elegir la columna perfecta.
Tipos de columnas de ducha
Columnas monomando
Tienen el mismo funcionamiento que el grifo del lavabo o de la cocina: se accionan abriendo una maneta que al girarla a la izquierda o derecha regula la temperatura del agua. Su principal ventaja es el precio, ya que se pueden encontrar columnas de ducha monomando por muy poco más que un grifo de ducha normal. Su principal desventaja es que siempre se pierde un rato regulando la temperatura y con ello se desaprovecha una gran cantidad de agua. Otro punto flojo de estas columnas son los cambios de temperatura en el agua: cuando alguien abre un grifo en otro punto de la vivienda se debe regular de nuevo la temperatura con el mando.
Columnas de ducha termostáticas
Son sin duda la mejor opción. Ofrecen un nivel de confort total, ya que a diferencia de las monomando no se debe regular la temperatura, y esto evita los temidos cambios en el agua cuando alguien en casa abre otro grifo. Hay una gran variedad de columnas termostáticas. Su principal desventaja es que el precio acostumbra a ser un poco más elevado.
Por último, solo queda escoger el diseño que más te guste y que se ajuste a tu presupuesto.
Por lo general se puede encontrar una gran variedad, pero lo que sin duda va a marcar la elección es si el rociador es de forma redonda o cuadrada. Los de forma cuadrada son más actuales y modernos, mientras que los de forma redonda ofrecen un aire clásico y minimalista.
