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En esta guía de compra vemos cómo elegir un grifo de baño. El grifo es un elemento que puede añadir un aire especial al cuarto de baño. En el mercado se encuentran estilos muy variados. Aparte del diseño, hay otros aspectos relevantes a tener en cuenta a la hora de escoger un grifo, en función si es para el lavabo, bidé, ducha o bañera como son los tipos de instalación, tipos de grifos y opciones de acabados como las válvulas de desagüe.
1. Tipo de instalación
En el baño tenemos distintos tipos de grifos que pueden ser de lavabo, bidé, bañera o ducha. Dentro de esta gama encontramos diferentes tipos de instalación.
- Instalación sobre repisa: Es la más utilizada para el lavabo y el bidé. Hay una gran variedad y tanto los grifos monomando
como los bimando pueden adaptarse a la instalación. En caso de elegir un grifo monomando, es importante mirar hacia dónde abre la maneta para evitar que toque con la pared. Es importante asegurarse de que el grifo escogido se adapta al espacio donde se vaya a instalar.
como los bimando pueden adaptarse a la instalación. En caso de elegir un grifo monomando, es importante mirar hacia dónde abre la maneta para evitar que toque con la pared. Es importante asegurarse de que el grifo escogido se adapta al espacio donde se vaya a instalar.
- Instalación empotrada: Los de instalación empotrada son una alternativa de moda para la decoración en el baño. Pero si la instalación no está preparada para ir empotrada será costoso adaptarla. Para los grifos empotrados la instalación debe realizarse a medida, dependiendo de las especificaciones del fabricante. Si se desea hacer una reforma total del baño son una buena opción pero si sólo se va a cambiar un grifo que no está empotrado, es recomendable escoger uno que se adapte a la instalación existente.
- Instalación mural a pared: Es la más utilizada en la bañera o ducha. Este tipo de instalación permite sustituir el grifo de forma sencilla. Su característica principal es que los tubos llegan por la pared empotrados y dejan dos tomas donde se conecta el grifo. Hay una gran variedad de modelos de grifo: monomando, bimando o termostático.
Si tienes dudas para elegir entre un modelo u otro, te ayudamos a resolverlas en el post Grifos de pared o grifos de repisa. Ventajas e inconvenientes >
2. Accionado del grifo
Para que el agua empiece a salir deberemos accionar el grifo, pueden existir distintas maneras de accionarlo:
- Grifos Electrónicos: Sin duda los grifos temporizados proporcionan ahorro y comodidad. Este tipo de grifos se accionan con un sensor o pulsador. Los que funcionan con sensor, se activan al poner las manos delante y se desactivan al retirarlas. Los que funcionan con pulsador, se abren cuando pulsamos y tienen predefinido un tiempo de apertura. Una vez pasado ese tiempo el grifo se cierra. Otra ventaja de estas griferías es que no tienen palancas ni mandos de apertura, lo que proporciona un diseño minimalista y espacioso.
- Grifos Monomando: Los grifos monomando proporcionan un control muy ajustado de la temperatura del agua. Un solo mando abre el paso del agua al accionarlo y ajusta la temperatura girando hacia la derecha o izquierda. Hay grifos monomando para todos los elementos del cuarto de baño ya sea lavabo, bidé, bañera o ducha. La grifería monomando nos proporciona mayor seguridad, comodidad y ahorro.
- Grifos Bimando: Son un clásico de la grifería, los dos mandos por separado dan libertad total para abrir el agua fría o caliente. La regulación del agua es algo más difícil, ya que hay que mesurar los dos mandos para conseguir la temperatura idónea.
- Grifos Termostáticos: Los grifos termostáticos son indicados para la bañera o la ducha. Una de sus mayores virtudes es el control total de la temperatura, con uno de los mandos regulamos la temperatura y con el otro el caudal y por donde sale el agua de la ducha. Son muy cómodos y seguros. Otra de sus grandes ventajas es que con un grifo termostático no tendremos esos temidos cambios bruscos de temperatura en el agua.
3. Opciones de acabado del grifo
A la hora de elegir un grifo tendremos en cuenta el acabado de este mismo. En el mercado hay muchas opciones disponibles para el acabado final, escogeremos uno u otro dependiendo de nuestras particularidades.
- Cromo: Es un acabado muy brillante con una tonalidad plateada. Es un acabado con una larga vida útil ya que es resistente a la corrossión y los arañazos.
- Acero inoxidable: Este acabado es el más popular de la grifería de baño. Es un acabado que facilita la limpieza y el mantenimiento gracias a que es un material resistente a la oxidación.
- Níquel: Es un acabado resistente a la corrosión y a la oxidación. Este acabado ofrece un brillo especial y elegante.
- Latón: Este acabado surge de la fusión de cobre y zinc y es utilizado para la estructura de la grifería.
Si buscas originalidad y diferenciación, puedes combinar los distintos acabados en los diferentes grifos de tu baño.
4. Válvulas de desagüe
Hay tres tipos: la tradicional, la de pulsación o la automática:
- Válvula con tapón de goma y cadenilla: Este tipo de válvula nunca va incluida en el grifo y actualmente está casi en desuso. Se caracteriza por tener un tapón de goma para cerrar el agua y una cadena que une el tapón al grifo para poder tirar de él. Habitualmente estas válvulas van con el sifón del lavabo y se pueden sustituir con facilidad.
- Válvula de pulsación o push (click-clack): Las válvulas de pulsación son versátiles y cómodas y pueden sustituir fácilmente a las de tapón de goma. La instalación de la válvula es igual que la tradicional pero con un aspecto más moderno. Se cierra cuando pulsamos en la válvula y se abre volviendo a pulsar.
- Válvula de desagüe automática: Las válvulas de desagüe automático habitualmente van incluidas con el grifo, se accionan mediante una palanca situada detrás del cuerpo del grifo y su ventaja es que no hay que tocar el agua para vaciar el lavabo o bidé.
